jueves, 14 de junio de 2018

Las técnicas de corte del arco eléctrico (y Parte 4ª)



Extinción del arco en el vacío

Con el vacío abordamos una técnica original en la que las propiedades de interrupción han sido analizadas y puestas de manifiesto ya en 1.920; pero han sido necesarios 30 años para que en 1.950 los primeros interruptores automáticos fueran puestos en el mercado, en el año 1.960 un gran constructor americano proclamó con vigor que esta técnica debía conocer un rápido desarrollo en breve tiempo, hay que reconocer que esta predicción se realizaría con un gran retraso.

Hay que tener en cuenta que el principio de funcionamiento de un interruptor al vacío es extremadamente diferente al de los otros aparatos y además es rico en contradicciones y dificultades técnicas de todos los géneros.

El vacío dieléctrico

En primer lugar la remarcable rigidez dieléctrica del vacío no es debida, como en otros medios, a las múltiples causas de amortiguación de los choques inelásticos de los electrones con las moléculas del gas, el caso es que no se producen dichos choques.  En un vacío perfecto no hay posibilidad de desencadenar el mecanismo de avalancha electrónica por ionización en cascada que conlleva la perforación dieléctrica.  En la práctica, los vacíos reales son imperfectos y sobretodo la presencia de los electrodos suavizan esta visión ideal del fenómeno; pero de todas formas los comportamientos son espectaculares ya que un espacio entre electrones de un centímetro, en un vacío del orden de 10-6 milímetros de mercurio, es capaz de resistir una tensión de cresta del orden de los 200 kV.

Por otra parte, a diferencia de los otros medios, la rigidez dieléctrica del vacío aumenta poco con la distancia de aislamiento, lo que limita la tensión aplicable a cada intervalo de ruptura, independientemente de los problemas que entraña la inevitable producción de rayos X cuando elevamos la tensión

El arco en el vacío

Siguiendo el proceso de la ruptura, todos los mecanismos que aparecen en ella, son singulares.

La formación de vapores metálicos

El cebado de un arco de fuerte intensidad en el vacío lleva consigo una inevitable vaporización de los electrodos que desarrolla rápidamente entre los contactos una presión dinámica que puede alcanzar  valores comparables a los atmosféricos.

En su inicio, este arco se parece un poco a los de los otros aparatos por una columna conductora fuertemente concentrada y una mancha catódica única e incandescente cuya superficie, a la temperatura de ebullición, es un emisor de abundantes vapores metálicos.

Cuando la corriente decrece, la presión de vapor se reduce rápidamente debido a la difusión de estos vapores hacia las regiones alejadas del arco desde donde son atraídos, constantemente, por la condensación sobre las rejas metálicas dispuestas para este fin (figura 41 punto 7).

El régimen de arco difuso

Por debajo de una cierta intensidad se comprueba un cambio en el comportamiento del arco que se modifica bruscamente pasando a un régimen de descarga difusa.  La mancha catódica se divide en múltiples pequeñas manchas que se desplazan a gran velocidad por la superficie del contacto, repeliéndose mutuamente.  Estas manchas se caracterizan sobre todo por la alta densidad de corriente que toma valores de millones de amperios por centímetro cuadrado: de este fenómeno se deduce la formación de verdaderos surtidores de electrones con formación de grandes cantidades de vapores metálicos (Figura 40).

El fenómeno es exactamente igual, entonces, que en un diodo de vacío: cuando la corriente se anula los electrones cesan de atravesar el espacio interelectrodos y la resistencia de este espacio, por efecto de la tensión inversa, adquiere rápidamente un valor infinito, el ánodo, frío es incapaz de emitir a su alrededor, electrones.


Figura 40 : Arco concentrado (a) y arco difuso (b).

La Importancia de los contactos

En cuanto a la rigidez dieléctrica, se regenera tanto más rápidamente cuanto menor es la presión residual del vapor metálico, es decir, en función del establecimiento del régimen difuso.

Para la obtención de elevadas prestaciones todo el problema consiste en pasar lo más rápidamente posible del régimen de arco concentrado a arco difuso.  El valor de la corriente al que se produce el cambio de régimen depende esencialmente de la forma y la naturaleza de los contactos y posee unos límites de difícil trasgresión (Figura 41).


Figura 41: Secciones esquemáticas de cartuchos de vacío. Contacto de un interruptor de vacío. 
Las ranuras en espiral tienen por objeto provocar la rotación de las raíces del arco
 por los efectos de esfuerzos electrodinámicos.

La Inestabilidad del arco

El arco difuso es inestable; cada mancha catódica exige una intensidad mínima para emitir su chorro de electrones.

Por debajo de esta intensidad mínima, la corriente se corta bruscamente lo que explica la tendencia característica de este tipo de aparatos en provocar sobretensíones de maniobra por cortes de corriente antes del paso por cero natural.

Como la corriente cortada súbitamente es tanto más elevada cuanto mayor es la corriente maniobrada por el aparato, aparece una incompatibilidad considerable entre las altas prestaciones de corte y la reducción de las sobretensiones de maniobra.

La solución a este dilema es difícil ya que, a diferencia de las otras técnicas el número de parámetros sobre los que se puede actuar es sumamente reducido con lo que el constructor está realmente desarmado; no es posible variar la presión del medio, el diámetro de las toberas o alargar el arco; por otra parte, cada detalle conlleva una serie de problemas tecnológicos totalmente nuevos y poco experimentados.

Las distintas tecnologías de corte en vacío

Todos los constructores se encuentran frente a las mismas exigencias:

- reducir el fenómeno de arranque de corriente para limitar las sobretensiones,
- evitar la erosión precoz de los contactos para obtener una durabilidad mecánica elevada,
- retrasar la aparición del régimen de arco concentrado para aumentar el PdC,
- limitar la producción de vapores metálicos para evitar los disparos indeseados,
- conservar el vacío, indispensable para mantener las características de corte durante la vida del aparato.

Sus soluciones se orientan principalmente en dos direcciones: el control del arco por un campo magnético y la composición de los materiales de los contactos.

Elección del campo magnético

Se emplean dos tipos de campos magnéticos: radial y axial.

1.       La tecnología del campo magnético radial (figura 42)


Figura 42: Contactos que crean un campo magnético radial. 
El arco obedece las leyes del electromagnetismo, se desplaza 
desde el centro hasta el extremo de los «pétalos» y después 
gira en la periferia de los electrodos.

El campo está creado por la corriente que circula entre los electrodos previstos a este efecto.

En caso del arco concentrado los puntos de arranque del arco se desplazan con un movimiento circular, el calor se reparte uniformemente lo que limita su erosión y la densidad de los vapores metálicos. Cuando el arco es difuso, los puntos de arranque se desplazan libremente sobre la superficie del cátodo como si fuera un disco sólido.

Las formas de los electrodos bastante complejas que esta tecnología exige, hacen más difícil la rigidez dieléctrica entre electrodos.

2 .      La tecnología del campo magnético axial (figura 43)

La aplicación de un campo magnético axial imprime a los electrones y a los iones una trayectoria helicoidal siguiendo las líneas del campo magnético. Esto estabiliza el arco difuso y dificulta la aparición del régimen concentrado.

La aparición de marcas anódicas se evita y la erosión queda limitada, lo que permite alcanzar potencias de corte elevadas.

Este campo magnético puede generarse por unas espiras internas o externas a la cámara de vacío, recorridas permanentemente por la corriente.

Las espiras internas deben protegerse del arco.

Las externas, no tienen el riesgo del arco, pero en contra sus dimensiones son mayores, aumentando las pérdidas térmicas e imponen limites debidos al riesgo de calentamiento.

La tabla de la figura 43 presenta una comparación entre estas dos tecnologías.


Figura 43: Contactos que crean un campo magnético axial.


Campo radial
Campo axial
Resistencia de
Contacto/calentamiento
+
-
Tensión de arco
-
+
Erosión de los contactos
-
+
PdC/diámetro de los contactos
=
=

Tabla de figura 43: Tabla comparativa de los puntos fuertes
y puntos débiles de cada tecnología.

Ventajas del corte en vacío

·         Seguridad de operación.
·         Insensible al medio ambiente
·         Resistencia mecánica y eléctrica elevada.
·         Sin necesidad de mantenimiento de las partes activas: más económico.
·         Mantenimiento más sencillo.
·         Mayor fiabilidad (menor número de piezas que en las antiguas técnicas de corte.
·         Duración superior a la de los disyuntores en aceite.
·         Volumen más reducido respecto de los disyuntores de corte al aire; más compacto.
·         Corte sin dificultad de casi todas las corrientes.
·         Reducida energía de maniobra.
·         Regeneración dieléctrica muy rápida.
·         Mucho menos pesado y ruidoso que las antiguas técnicas.

Inconvenientes del corte en vacío

·    Creación de sobretensiones (reencendidos múltiples) que pueden deteriorar los receptores. Los motores accionados por disyuntores de vacío deben ser protegidos contra las sobretensiones de maniobra.
·      Una cierta debilidad en corte capacitivo “back to back”.
·      Ningún dispositivo permanente de detección de fugas durante la operación, y por consiguiente, del control del medio de corte.
·      En caso de fuga (ruptura de la cámara), los aparatos no soportan las características asignadas (de tensión y corriente), produciéndose consecuentemente encendido. No conservan sino 1/100º de su resistencia dieléctrica (ley de Paschen).
·      Presentan dificultades en atmosferas difíciles. Como las cámaras son de pequeñas dimensiones, éstas ofrecen una línea de fuga muy corta en el aire.
·      Vulnerabilidad a la corrosión a nivel de las soldaduras (cierre de las cámaras).
·   Contactos macizos y extremo con extremo. Tienen una tendencia natural a rebotar en el momento del cierre.
·       Esfuerzos estáticos importantes con el aparato cerrado.
·       Procedimiento de fabricación extremadamente delicado que genera importantes inversiones.

Perspectivas

Todas las consideraciones anteriores explican, por si solas, la lentitud del desarrollo de los aparatos de vacío.

De salida, con aparatos para prestaciones modestas, no se presentaron dificultades en obtener resultados totalmente satisfactorios.  Se explica por el inicio con aplicaciones específicas en el dominio de contactores e interruptores automáticos de media tensión.

Es como consecuencia de lo anterior que recientemente los cartuchos de vacío han hecho su aparición en el mercado de los interruptores automáticos con prestaciones que permiten cubrir el conjunto de aplicaciones en la gama de la media tensión (Figura 44).

Los fenómenos de sobretensiones de maniobra están más o menos dominados según las tecnologías desarrolladas y en este caso de recomienda, normalmente, la instalación complementada de cartuchos descargadores para amortiguar los fenómenos de sobretensiones.

Los cartuchos de vacío presentan como característica general la ventaja de un volumen reducido y una buena característica de vida así como la seducción de no precisar casi mantenimiento y por ser al vacío, totalmente ininflamables.

Pero no debemos olvidar que el cartucho de vacío constituye sólo una parte, la más importante, del aparato.  La fiabilidad total del conjunto dependerá también del mecanismo de maniobra que deberá hacer frente a los esfuerzos elevados necesarios a las intensidades nominales y resolver el problema del riesgo de soldadura de contactos que constituye una de las dificultades características de esta técnica.  Un desarrollo creciente de los aparatos de vacío puede preverse, en el dominio de las medias tensiones pero sin precisar la rapidez que pueda conocer esta tecnología.


Figura 44: Cámara de corte en vacío

Ruptura estática

No podríamos considerar completado el análisis de las técnicas de corte si olvidáramos la utilización de los semiconductores que constituyen actualmente la única alternativa a oponer al fenómeno del arco eléctrico.

Más aún que la ausencia del arco, porque su comportamiento se acerca al máximo al interruptor ideal por la ausencia de manifestaciones externas.

Su resistencia pasa de un valor muy bajo a un valor considerable de forma totalmente automática por el sólo hecho del paso de la corriente por su cero natural, como se intenta con el arco eléctrico, pero esta vez el fenómeno se desarrolla a la temperatura ambiente.

Lamentablemente, los semiconductores, por naturaleza, poseen una inercia térmica extremadamente débil lo que origina su incapacidad de soportar sobrecargas, incluso para tiempos muy cortos.

Si bien se encuentran en la mejor posición, desde el punto de vista de nivel de energía de ruptura con el papel del aparato ideal son, por el momento, incapaces de hacer frente a la modesta energía que se desprende en la ruptura y no son económicamente utilizables en los dominios del arco eléctrico.  De esperar que el desarrollo de los dispositivos de sincronización suficientemente rápidos y precisos permitirá reducir las solicitaciones térmicas excesivas a las que ahora se ven sometidos, (Figura 45).


Figura 45: Funcionamiento esquemático de un interruptor sincronizado con diodos.
La utilización de un contacto A, correctamente sincronizado, reduce la corriente 
de los diodos a una pequeña onda triangular (rayada en la figura), 
limitando así considerablemente la solicitación térmica. El contacto B debe 
abrirse antes que la tensión de restablecimiento se invierta nuevamente.


Teniendo en cuenta las ventajas importantísimas (1) que puede soportar esta nueva tecnología en el campo del corte de corrientes, hemos de prever, sin riesgo de equivocarnos, que habrá que contar con esta técnica en el futuro.

(1) Las ventajas de los semiconductores, en la ruptura, son, entre otras:
-          obtención de rupturas ideales, sin sobretensión de maniobra;
-          ausencia total de desgaste y manutención;
-          la posibilidad de predeterminar las prestaciones del aparato.

Conclusión

¿Qué elección puede hacer hoy en día el utílizador teniendo en cuenta las diversidades técnicas que el mercado de la aparamenta de ruptura pone a su disposición?

Ver post: ¿Qué elegir: interruptor automático SF6 o Vacío? En el siguiente link:

El problema de la elección consiste, desde nuestro punto de vista, seleccionar para cada aplicación la técnica o las técnicas que aporten simultáneamente:

-          la mejor seguridad de empleo para personal y material;
-          las menores solicitaciones de mantenimiento y explotación;
-          el perfecto dominio de las sobretensiones de maniobra a niveles no peligrosos para el material;
-          la total capacidad para responder a las exigencias del avance técnico y la reducción de volúmenes en condiciones de optimización.

La tabla de la Figura 46 resume una síntesis de las características de cada técnica de ruptura con su encuadre en cada dominio de empleo y el grado de adecuación al dominio.  Una 'señal de tendencia' indica nuestra predicción de futuro en función de su capacidad para atender a las exigencias del mercado venidero.

La tabla pone en evidencia:

-     el mantenimiento de la posición de monopolio de la ruptura en el aire dentro del dominio de la baja tensión, así como un mantenimiento de esta técnica en la gama inmediata de la media tensión;
-   la debilitación previsible y ya comprobada de las dos técnicas que han dominado el mercado durante muchos años: el aire comprimido y el aceite;
-    el desarrollo reciente, después de unos años de incertidumbre, de la ruptura en el vacío, sin atrevemos a aventurar el desarrollo futuro de esta técnica;
-  el desarrollo de la ruptura asistida por semiconductores en la que el futuro, todavía incierto, es realmente prometedor;
-   por encima de todas, el desarrollo acelerado de la ruptura en hexafluoruro de azufre, que actualmente, en el dominio de la alta tensión se ha convertido en el 'gas de los fabricantes de aparamenta".


Figura 46: Las grandes técnicas de ruptura.

La “flecha de tendencia” indica, para cada técnica, la previsión, a medio plazo de la evolución y posición relativa a las otras técnicas y posición en cada dominio.

Criterios / Técnicas de corte

Aceite

Aire magnético

Vacío

SF6

Seguridad / fiabilidad global

○○

○○○

○○○

Control del dieléctrico

Innecesario

○○○

Comportamiento en caso de fuga

Innecesario

○○○

Gama de tensión

○○

○○

○○○

Resistencia

Mecánica

○○

○○○

○○

Eléctrica

○○

○○○

○○

Gama de poder de corte

○○

○○○

○○○

○○○

Sobretensiones de maniobra

(cortes inductivos)

○○○

○○○

Reenganche rápido

○○○

○○○

Maniobra de baterías de condensadores

○○

○○○

Dimensiones

○○

○○○

○○○

Facilidad de instalación

○○

○○○

○○○

Mantenimiento

○○

○○○

○○○

Insensibilidad a las atmosferas difíciles

(líneas de fuga)

○○

○○○


Comportamiento Mediocre: ● 

                               Bueno: ○

                               Muy bueno: ○○

                            Excelente: ○○○

Tabla comparativa de las diferentes técnicas de corte


Bibliografía:

El proceso de corte con un interruptor automático SF6 de autocompresión, tipo Fluarc.
J. HENNEBERT, Cuaderno Técnico nº 112, Schneider Electric.
El proceso de corte con un interruptor automático o un contactor Rollarc mediante arco giratorio en SF6. C. DUPLAY, Cuaderno Técnico nº 123. Schneider Electric.
El control de las sobretensiones de maniobra con los aparatos con SF6. O. BOUILLIEZ, Cuaderno Técnico nº 125. Schneider Electric.
Interruptor automático Fluarc SF6 y protección de motores MT. J. Hennebert, D. Gibbs, Cuaderno Técnico nº 143. Schneider Electric.
Control-mando y protección de motores MT. J.-Y. BLANC, Cuaderno Técnico nº 165. Schneider Electric.
El corte por autoexpansión. G. BERNARD, Cuaderno Técnico nº 171. Schneider Electric.
SF6 propiedades y uso en interruptores automáticos en MT y AT. D. KOCH, Cuaderno Técnico nº 188. Schneider Electric.
Maniobra y protección de baterías de condensadores. D. KOCH, Cuaderno Técnico nº 189. Schneider Electric.
Las técnicas de corte en MT. Serge THÉOLEYRE, Cuaderno técnico nº 193. Schneider Electric.
Seguridad, operación y mantenimiento de interruptores de potencia. A. Granero.


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