viernes, 24 de febrero de 2023

Protección del riesgo de incendio de origen eléctrico

 


Origen de los incendios en los edificios.


Los dispositivos diferenciales son equipos eficaces que garantizan este tipo de protección, ya que únicamente el nivel de la corriente de fuga permite controlar el riesgo.

Para los esquemas TT, IT y TN-S, el riesgo de incendio de origen eléctrico queda paliado por la utilización de dispositivos diferenciales de 300 mA.

Análisis del riesgo

·         De un estudio realizado por una compañía de seguros contra incendios en entornos industriales y de oficinas en los años 80-90 en Alemania se desprende:

o   Que el coste era muy elevado: varias centenas de millones de euros.

o   Un crecimiento del 600% del importe de los siniestros bastante superior al del PNB (en 20 años > 2 veces el PNB).

La percepción del riesgo de incendio es una necesidad no sólo en el plano de la seguridad sino también en el económico.

El análisis de los fenómenos ha demostrado que el riesgo de incendio de origen eléctrico (que es del orden del 40% de las causas de los siniestros) es una causa importante.

·         Del análisis se derivan 2 causas principales:

o   La 1ª causa importante se debe a creaciones y recorridos de arcos eléctricos en presencia de humedad. Estos arcos sólo pueden desarrollarse con bucles de defectos impedantes (> 0,6 Ω) y aparecen únicamente con defectos de aislamiento o con corrientes parásitas. Es suficiente poca energía para activar este fenómeno (algunos julios), es decir, una corriente de defecto de aislamiento o una corriente parásita 300 mA presentan un riesgo real de incendio

 

Algunos ensayos han demostrado que puede desarrollarse una corriente de fuga de aislamiento de bajo valor (algunos mA) y, a partir de una corriente de 300 mA, generar en un entorno de polvo húmedo una salida de incendio.

o   La 2ª causa está relacionada con los calentamientos no controlados generados por protecciones de canalizaciones mal ajustadas o impedancias de bucle de defecto mal evaluadas (principalmente debidas a la obsolescencia y falta de mantenimiento de la instalación). Las protecciones térmicas que no desempeñan correctamente su función y los calentamientos excesivos debidos a las sobreintensidades o a los cortocircuitos se producen en la instalación y conllevan un incendio.

Normas de instalación

·         La norma de instalación CEI 60364-3 define las diferentes categorías de edificios. Concretamente, en su apartado 322.5, las caracteriza con respecto a los riesgos, es decir:

o   BE2: riesgo de incendio.

o   BE3: riesgo de explosión.

Precisa las exigencias particulares que deben aplicarse, bien para esta categoría de edificios, o bien:

o   En el apartado 422.3.10 de la norma CEI 60364-4-42, la utilización de dispositivos diferenciales con umbral regulado a 500 mA: está en curso una evolución hacia el valor de 300 mA.

o   En el apartado 422.3.13 de la norma CEI 60364-4-42, prohibición de instalación del esquema TN-C.

De forma general, recomienda la utilización de los dispositivos diferenciales para todos los tipos de instalación de BT, como los dispositivos de prevención de riesgos de incendio.

·         El National Electrical Code (NEC) (norma de instalación en EE.UU.) obliga a utilizar GFP*. El esquema TN-S según NEC no permite controlar la impedancia de bucle de defecto de aislamiento (es el caso típico de la segunda causa de defecto que conlleva disparos de incendio). Con este equipo GFP se pretende obtener un disparo rápido antes de que el defecto genere una corriente importante y destructiva. Los ajustes de los umbrales abarcan desde algunos centenares de amperios hasta 1.200 amperios.

*GFP (Ground fault protection): Dispositivo de medida de corrientes homopolares que circulan en caso de fallo en el esquema TN-S (práctica americana).


Bucle de defecto mal controlado en un esquema NEC.


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