viernes, 17 de julio de 2015

La cromatografía de gases en ésteres naturales para Transformadores


Al margen de las ventajas e inconvenientes que los ésteres naturales y aceites minerales puedan presentar como fluidos aislantes y refrigerantes para transformadores,  consideraremos, de cara al presente debate, el hecho de que el origen y las estructuras moleculares de los ésteres naturales y los aceites minerales son completamente diferentes, ya que, mientras los esteres naturales son de origen vegetal (semillas de soja, maíz o girasol) el aceite mineral procede del refino del petróleo (nafténico o parafínico).

La experiencia acumulada en el monitoreo y diagnóstico de fallos por medio de la cromatografía de gases en los aceites minerales (primeros análisis en el año 1956) contrasta fuertemente con la de los ésteres naturales (primeros análisis en el año 2005), esta falta de conocimientos técnicos de campo condicionan notablemente los criterios en el diagnóstico sobre los fallos en transformadores que puedan derivarse con la utilización de esta metodología, máxime cuando los análisis cromatográficos que se llevan a cabo actualmente en ésteres naturales se realizan, según las normas ASTM D6871, IEEE C57.147 o IEC 62770 y a falta de otras más específicas, con los mismos procedimientos que los aceites minerales e incluso utilizando a estos como patrón de comparación.

La literatura disponible hasta la fecha especifica que ante una misma magnitud de falta, los ésteres naturales producen menos cantidad de gases y diferentes coeficientes de solubilidad que los aceites minerales, aspectos que no pueden obviarse ya que en caso de ser ciertas estas precisiones harían inaplicable el diagnóstico por el clásico triángulo Duval.

Por otro lado, la composición molecular de los ésteres naturales está formada por enlaces de carbono e hidrogeno siendo esta una fuente de emisión de gases óxidos de carbono (CO, CO2), circunstancia que también ocurre durante la descomposición térmica de la celulosa, este incidente puede igualmente ser otro motivo de imprecisión en los criterios de fallo.

Por consiguiente y considerando las particularidades y diferencias entre los esteres naturales y los aceites minerales, deberían realizarse estudios particulares para el caso de los aceites vegetales. De esta manera se podría conocer cómo el DGA puede aplicarse a esta clase de líquidos.

NOTA: Recientemente Michel Duval ha publicado un triángulo específico para éster naturales, lo cual confirma los comentarios que se incluyen en este texto.

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